"De Tín Marín, de Do Pingüe, Cúcara Mácara títere fue.
Yo no fuí, fue Teté, pégale, pégale que este fue."
San Nicolás y Santa Claus
Devoción, ritos paganos medievales y... ¡Coca Cola!
por Alessandro Indelli
El 6 de diciembre, día de San Nicolás de Bari, es día de regalos para los niños de muchos países norte-europeos. Un viejo señor con la barba blanca acompañado por simpáticos elfos y enanos distribuye juguetes a los niños buenos desde hace más de 1000 años. Este señor, pero, no viste de rojo, su barriga es del tamaño más normal y su piel es bastante oscura dado que procede de Myra, en Turquía. Bastante lejos de los estereótipos de la publicidad. Pero de ahí ha nacido la leyenda de Santa Claus (Papá Noel).
Estábamos en los años entre las dos guerras mundiales y Coca Cola decidió cambiar el look a San Nicolás, lo vistió de blanco y rojo (sus colores...), lo engordó un poquito y le hizo unas mejillas rosas y simpáticas. Hasta le cambió de fecha para reunir las tradiciones de los países anglo-sajones a aquellas de los países en donde era el niñito Jesús que traía regalos a los niños buenos. Y así nació Santa Claus.
A su vez, la tradición que asigna a San Nicolás este papel se deriva de una fusión entre ritos mágicos paganos y la iconografía cristiana. Los primeros se remontan a la época de la caída del Imperio Romano, la segunda a la época de la evangelización de los territorios norte-europeos. Según los antiguos ritos paganos, elfos, enanos y otros seres mágicos celebraban la llegada del invierno distribuyendo regalos durante fiestas nocturnas alrededor de grandes fuegos. La tradición cristiana, en cambio, asigna a San Nicolás el papel de protector de los niños y benefactor de los jóvenes debido dos milagros que cumplió el mismo Obispo de Myra en dos episodios distintos de su vida. En el primer episodio, salvó la vida a tres niños matados por un hostelero sin escrúpulos que pretendía darlos a comer a sus clientes. En el segundo, donó tres bolas de oro a tres muchachas que habían perdido su dote debido a la quiebra de su papá y que por este regalo pudieron casarse.
Fuente: http://www.quieroitalia.com/public/Viajes/Bari/San_Nicolas_y_Santa_Claus.asp
Ya entendieron el título de la entrada?...
Hoy es el día de Mi Santo, mi cumpleaños y como antes acostumbraban a ponerle el nombre del Santo, pues mi padres seguro no vieron el calendario ese día.
Y deseo de corazón que pasen unas fiestas en compañía de quienes aman, este año pasamos gratos momentos, GRACIAS a quienes me acompañaron con sus fieles comentarios, a quienes se asomaron a ver en qué estaba y sobre todo la amistad y cariño demostrados de tantas maneras, tanto a mi, como a María José (cartas, correos, intercambios, regalos, envío de diseños, SAL, etc.).
Me voy de vacaciones y nos vemos el próximo año, nos leeremos pronto.
Un abrazo enorme y gracias también a ustedes, por compartir todos sus trabajos conmigo, aprendí mucho... montones.
Ahora a disfrutar del verano!!!!
Les dejo una pincelada del fin de semana en Copey de Dota, San José:
Casa de mi bisabuela
Ale.